Mediante las células fotovoltaicas que forman la placa solar, la radiación solar se transforma directamente en electricidad, por el efecto fotovoltaico, aprovechando las propiedades de los materiales semiconductores. Las células fotovoltaicas están formadas con Silicio como material base.

Las células fotovoltaicas, generalmente son de color negro o azul, se asocian en grupos y se protegen de la intemperie formado los módulos fotovoltaicos. Por su caracterización los módulos se miden en unas condiciones determinadas: 1000W/m2 de iluminación solar y 25ºC de temperatura de las células. La máxima potencia generada en estas condiciones por cada móculo fotovoltaico se mide en Wp (vatios pico). Asi mísmo, la energia de mide en kWh (kilo watios hora), siendo 1 kWh la energía que produciría 1kWp en condiciones de máxima potencia durante 1 hora.

Denominamos generador fotovoltaico al conjunto de módulos fotovoltaicos, junto al cableado eléctrico que los unen y los elementos de soporte y fijación propios de la instalación. El generador fotovoltaico produce energía eléctrica en corriente continua, y sus características instantáneas (intensidad y tensión) varían con la radiación solar y con la temperatura ambiente. A través de equipos electrónicos, la electricidad generada se transforma en corriente alterna, con las mismas características que la electricidad de la red convencional.

La distribución de las placas solares fotovoltaicos debe ser homogénea asegurando en todo momento que la tensión de trabajo esté dentro del rango de tensiones y corriente admisibles por el inversor.

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